| Cuento*: | ALAS DE LUZ… ALAS DE MAGIA Y VIDA Kristal, es una hada que vive en una quinta, con muchos arboles frutales, muchas aves se posan y construyen sus nidos en ellos, hay tantos pajaritos, de pecho rojo, otros de pecho amarillo, también infinidad de periquitos o cotorritos verdes, de esos que les encanta hablar y repetir palabras, pero lo que mas le gusta a esta hermosa hada; son las fiestas, que se llevan acabo en esta quinta, cuando hay algún evento o fiesta, Kristal observa a los chicos y chicas que se divierten a más no poder, algo más que le gusta a Kristal, es el pastel, las fresas, los dulces, las flores, que los asistentes comparten en las fiestas. Cuando la fiesta termina y se retiran todos los chicos y chicas, Kristal se deleita en grande con tanta variedad de comida, ella comparte con sus hadas amigas, que a una señal, acuden a la quinta, todas ríen, bailan, cantan. Las hadas se retiran a sus casas, Kristal decide llevar un poco de todo al hada anciana, llega con la comida, pero cuando ya se retira el hada anciana le dice: ¡Espera, aun no te marches¡ Te contaré un gran secreto, escucha con mucha atención, la abuela susurra al oído de Kristal, cuando la abuela termina de decirle todo a kristal, Kristal responde: ¡Gracias abuela, pero es cruel hacer eso, ¡no lo hare¡ El hada responde: ¡Entonces enfrentaras el fin de tu destino¡ Kristal, regresa preocupada a la quinta, pero al ver durmiendo a todas las aves, sonríe y se dispone a dormir, sin embargo ,Ramiro el cotorrito la ve llegar, Kristal , le dice que guarde silencio que es hora de dormir. Es un nuevo día el perro corretea a una mariposa, la mariposa se esconde, en el hueco de una raíz del árbol, de pronto un sismo sorprende a todos, las aves y los animalitos de la quinta, no saben hacia donde dirigirse, Ramiro le grita a Kristal que despierte, Kristal despierta, todo es movimiento en segundos, al querer buscar un lugar seguro, Kristal rompe sus alas. El sismo ha pasado, Kristal no puede volar, al dañarse sus alas, Kristal ha perdido su magia, al no poder volar, le será complicado ir por comida entre las plantas, el árbol en el que vive, ha caído a causa del sismo, se dice que cuando el árbol donde vive una hada muere, muere también el hada que lo habita. El hada anciana se lo había dicho, pero Kristal no pensó que llegaría a pasar,ahora era el momento de vivir o morir, pero kristal quería vivir, así que visito a la abuela, la abuela al ver las alas lastimadas de kristal, se quito sus alitas se las dio a Kristal, Kristal no había ido a eso, Kristal quería saber que podría hacer para seguir viviendo, si kristal aceptaba las alitas de la abuela, ella enfermaría o moriría , y perdería también su magia, asi que , preferia enfrentarse a su destino.
La posibilidad de seguir viviendo, era obtener la luz del sol, la luz de la luna, así que le pidió a Ramiro el cotorrito, la llevara al mar en noche de luna, cuando la luna reflejaba su hermosa cara,Kristal empezó a cantar y bailar una hermosa canción. La luna le pregunto: ¿Qué deseas hermosa hada? Kristal respondió: Tu luz mi bella luna, para mis alitas y la luz del hermoso sol La luna contestó: sabes que eso es imposible, la tierra estaría a oscuras, si ocurriese otro sismo, nadie sabría a donde dirigirse. Kristal exclamó: ¡No no quiero eso¡ ¡Como tampoco quiero las alas de la abuela, ella también las necesita¡ La luna al ver la nobleza de kristal, desprendió las alitas maltratadas de Kristal, e hizo que durmiera, ya comenzaba amanecer el sol estaba dando sus primeros rayos, la luna fue a su encuentro, le pidió colocara luz en las alitas de Kristal, como el sol no podía negarse ante tal petición y coqueteo de la luna, concedió luz para la magia de esas alas. Cuando Kristal despertó, vio sus hermosas alitas, que brillaban como la luz de la luna y del sol, la magia volvió a Kristal, la cual uso para ayudar a todo los animalitos, cuidar de su nueva casa, en un árbol de manzanas, llevo a vivir con ella a la abuela en la quinta, para tenerla cerca, pero la abuela escogió un árbol, donde había un panal con mucha miel, juntas compartieron bellos momentos, entre ellas dos , y con las demás hadas. En las noches de luna, Kristal cantaba y bailaba la canción, que le devolvió la esperanza de vida. La luna sonreía, el sol le guiñaba un ojo, cuando empezaba el amanecer. AUTOR: GABRIELA DIAZ |
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